Susan Mallery - Siempre te esperaré

Crítica realizada por Soraya

Sinopsis
Después de una desastrosa relación que la había dejado embarazada y sola, Hannah Bingham supo que debía regresar a Merlyn County; aunque eso significara tener que enfrentarse a su familia y explicar los errores que había cometido. Con lo que no había contado era con la presencia de Eric Mendoza, su amor de juventud, que se había convertido en un hombre peligrosamente guapo... y entregado a su carrera. Por mucho que dijera que su profesión lo era todo para él, Hannah sabía que deseaba tener un hogar y una familia...

Cuando Hanna, que acaba de llegar a la ciudad después de bastantes años, se entera de que el hospital Regional de Merlín County tiene en venta una casa a las afueras de la ciudad, concreta una cita con el encargado de venderla, para poder verla. Pero cuando llega a la reunión, en el propio hospital, su sorpresa es enorme al encontrarse con Eric Mendoza, un antiguo amigo del que ella estuvo enamorada en la adolescencia. Tras una breve charla, ambos quedan en que será él mismo el que le enseñe la casa, pues es un caso excepcional debido a que es precisamente ella la que la quiere comprar.

Tal y como lo ve, Hannah admite para sí misma que por un momento ha sentido como si el tiempo no hubiese pasado, aunque a la vez espera que él la vea de forma distinta a como la veía años atrás, pues ella fue una de las pocas amigas que él tenía, pero eso significa que nunca la vio como algo más que eso.

Un rato después cuando se reúnen frente a la casa, y mientras éste se la enseña, regresa la antigua camaradería que había entre ellos, y deciden quedar para cenar a la noche siguiente, así podrán concretar la venta pues Hannah nada más ver la casa piensa que es una auténtica preciosidad y no duda en comprarla. Sabe que el único fallo que tiene es estar demasiado lejos del hospital, por eso la venden, pues el mismo hospital ofrece alojamiento a sus médicos como incentivo para que trabajen en una ciudad pequeña.

Los protagonistas parten del mismo punto de partida, ambos han sufrido una infancia rodeados de pobreza. Pero curiosamente se conocieron durante una de las vacaciones que Hannah pasó con su padre, cuando la madre de Hannah murió, y ésta volvía a casa a pasar el verano después de estar todo el curso escolar en un internado. Mientras que Hannah disfrutaba de unas clases de vela, Eric era el muchacho que las impartía para poder pagarse sus estudios.

Desde siempre Eric ha deseado el éxito, nunca ha tenido bastante porque siempre hay más por conseguir. Ahora, siendo tan joven como es, tiene una posición dentro del hospital muy privilegiada, sin embargo quiere luchar por subir más peldaños. Hannah por su parte es totalmente distinta. Ella solo había soñado con encajar algún día, pues a pesar de ser una Bingham, y tener una familia muy rica, ella siempre ha sentido que no es totalmente una de ellos.

Entre charla y charla, ella le cuenta a Eric que ha vuelto antes de terminar su licenciatura en derecho, y éste no entiende muy bien qué le habrá hecho dejarlo todo antes de terminar. Hannah también le cuenta a su familia que se va a comprar una casa y que ha dejado los estudios, pero por el momento decide no decirle a nadie que todo es porque está embarazada de casi cuatro meses.

Ambos se sienten atraídos desde el principio, pero mientras ella quiere formar una familia y asentarse allí, él está dispuesto a trabajar más horas aún, y eso que ya apenas tiene vida social, o incluso marcharse a cualquier otro lugar. Desde el principio es evidente que no tienen la misma perspectiva de futuro, pero los días van pasando, se van encaprichando cada vez más, hasta que finalmente Hannah no tiene más remedio que decirle a Eric lo del bebé, pues estando de cerca de cuatro meses, es cuestión de tiempo que él mismo lo note. Aquí aclaro a favor de ella, que no tardó demasiado en decírselo, en cuanto vio que lo de ellos iba enfocado hacia una posible relación, consideró justo que él lo supiese, lo cual me gustó por parte de ella.

No voy a contar mucho más porque la novela es muy corta y la trama es muy sencilla. Chico conoce a chica, se alejan, pasan los años, chica tiene una mala experiencia y se queda embarazada y es entonces cuando vuelven a encontrarse. Ambos se están enamorado y chica le dice lo del bebé al chico, a partir de ahí os podéis imaginar cómo va a terminar la cosa.

Como digo es una novela sin trama secundaria, todo gira alrededor de la relación que ambos protagonistas mantienen. Y sinceramente a mí me ha bastado con eso. Susan Mallery es una autora bastante sencilla, pero que con pocas páginas me logra atrapar. Ésta en concreto no es de las mejores que he leído de ella, pero para pasar una tarde entretenida está bien.