Sophia James - La dama hechicera

Crítica realizada por Mc2

Madeleine Randwick era su rehén y una manera de conseguir lo que quisiera del hermano de ella. Como parte importante de las peligrosas y complicadas políticas fronterizas. Alexander de Ullyot, señor de Ashblane, no iba a tener reparos en usar a la joven para su propio beneficio. Además, debía acabar con ella igual que quería acabar con su hermano. Pero no podía hacerlo... Quizá fuera su melena de fuego la culpable o el suave tono de su voz que lo tenía hechizado. Sabía que esa mujer iba a ser un peligro, pero le intrigaba su testarudez y el empeño con que buscaba independencia.

Novela ambientada en Inglaterra en el siglo XIV.

Alexander Ullyot no se encontraba en su mejor momento. Acababa de perder a su mejor amigo, en otra escaramuza con Noel Falstone de Heathwater, y él mismo se encontraba gravemente herido.

Madeleine Randwick solamente deseaba una cosa, huir de Heathwater. Necesitaba escapar de su hermano Noel y de Liam Williamson, conde de Harrington y amante de su hermano. Su vida llevaba años convertida en un infierno, sometida a los deseos de su hermanastro. Ahora creía estar a salvo... hasta que el brazo de del mismísimo Alexander de Ullyot la atrapó. Encerrada en una celda sucia y maloliente, junto a su hermana Jemmie disfrazada de paje, esperaba que su captor decidiese su destino.

Alexander no podía apartar su mirada de la mujer de cabellos de fuego, con la señal de la cruz marcada en su piel, y un extraordinario don de curar que acaba de salvarle la vida. Pese a estar en deuda con ella, no podía olvidar su identidad, ni los rumores que circulaban por toda Inglaterra y que la habían hecho merecedora del apodo de la viuda negra.

Madeleine sabe que utilizar el fuego sanador que posee en su interior la podría tildar de bruja y hechicera pero no puede olvidar que es una de las mujeres de Cargne, famosas por su don. Además, su vida se encuentra en constante peligro por los secretos que su madre le reveló de todos sus amantes, y que podrían poner en peligro la seguridad de más de una nación. Aunque hay algo que Madeleine aprecia mas que su propia vida. Su hermana Jemmie ha sido protegida de su verdadero padre, un hombre de sangre real, que desconoce su existencia. Si alguien encontrara los documentos que lo atestiguan su vida tendría tan poco valor como la suya. Solo un verdadero caballero de honor, fuerte y poderoso, podría ayudarla. Pero para eso, tendría que conseguir convencerle, aunque solo dispusiera de su propio cuerpo para negociar.

La dama hechicera es una novela entretenida que se lee de un tirón. En ella la autora revela la crueldad de la edad media. La vida de la protagonista está inmersa en intrigas palaciegas, intentos de asesinato, intereses políticos y la inmersa codicia de nobles y reyes, muchos de los cuales cambian de bando una y otra vez merced al mejor postor. No es una novela de esas que tildamos como inolvidables, pero la trama no decae y está bien narrada. En cuanto a los protagonistas me ha gustado el papel de Alexander. Un hombre marcado por el honor y la justicia, que mantiene una lucha constante en su interior por estar enamorado de la hermana de su peor enemigo. Una mujer que tiene fama de depravada, lujuriosa y asesina. Madeleine se parece a otras hechiceras de novela. A pesar de su habilidad para curar, y sus amplios conocimientos de remedios caseros de la época, tenia un fuego sanador que la agotaba en extremo cada vez que lo utilizaba para salvar a otros. Entre los secundarios hay que destacar a Quinlan, un fiel amigo de Alexander, Jemmie, siempre vestida de niño como protección, y el pequeño Gillion, un niño de cinco años hijo del protagonista.

La puntúo con un 4/5.