Sarah McCarty - Instinto salvaje

Crítica realizada por Mencía

Lo bueno que tienen este tipo de novelas es que manteniendo un hilo conductor, pasamos de una pareja a otra: con lo que si una historia no engancha siempre queda la esperanza de que en la siguiente consiga nuestra aceptación. Claro que, en su contra, nos encontramos con que el desarrollo y la evolución de los personajes, en tan poco número de páginas, se vuelve una tarea complicada y la mayor de las veces imposible. Este tipo de novela no está pensada para las que necesitan profundizar. Suelen ser novelas ligeritas, sin mayor pretensión que el puro entretenimiento, y eso siempre que los personajes o la trama nos consigan enganchar.

Ésta es la segunda entrega de una serie, y como en el anterior volumen, nos ofrece tres historias en un solo libro. Aunque se puede leer independientemente, lo cierto es que sería recomendable haber leído el anterior, ya que vuelven aparecer los que fueron protagonistas en la otra entrega y se mantiene la problemática ambiental que quedó en suspenso.

Instinto salvaje, es una novela de argumento escaso donde se vuelve una y otra vez sobre la misma idea: la unión permanente de los miembros de la pareja y el carácter posesivo y protector de los protagonistas masculinos. Eso sí, varían las combinaciones. Tenemos una pareja de dos híbridos, otra de lobo y humana y la tercera de loba e híbrido (medio lobo).

Las chicas, por supuesto, tienen una personalidad acusada y son fuertes aun en su debilidad, son las perfectas supervivientes. Y al principio, como es de rigor en este tipo de novelas, no están por la aceptar a unos machos, que si bien pueden tener la llave de su felicidad sexual, no por ello creen que les ofrezcan garantía de nada más.

En cuanto a ellos, son mas instintivos; dominantes de palabra y gesto, pero llegado el caso tiernos cachorros. Aun con sus pequeñas diferencias parecen calcos. Que la autora haya decidido enfrentarlos a la superación de distintos retos personales o que su físico y cualidades varíe, es un mero barniz. Todos están cortados por el mismo patrón y su máxima aspiración es dar con la hembra que les ha sido asignada.

Hay novelas para todos los gustos, particularmente este tipo de modelo, bien llevado, me puede resultar de lo más sugerente. Otra cosa es que las expectativas que me creé en Garret, Daire y Curran no se cumplieran. Quizá esperaba más historia, complicaciones, tensión, y he terminado por tener que admitir que me hallaba ante una de esas novelas de las de mero trámite.

De lectura sencilla, argumento más sencillo todavía, personajes de complicaciones aparentes pero sin trasfondo, y una escena cumbre sexual por pareja, Instinto salvaje ha pasado sin pena ni gloria ante mis ojos. Lo que no quiere decir que las que sienten una inclinación especial por esos lupus man tan protectores no sepan disfrutar del "mía" que a ellos tanto les pone.

Por lo que he podido leer queda una entrega más de esta serie y espero tener ocasión de leerla. Quién sabe si en la siguiente entrega esté el lobo que me convenza....