Carol Finch - Un hombre solitario

Crítica realizada por Rocío C. Pérez

Con esta novela de Harlequin comienza la serie “Ryder”, llamada así por el apellido en común que tienen los cuatro primos rancheros: Wade, Quint, Vance y Gage, quienes protagonizarán su propia historia.

Wade, acompañado de Laura, inicia esta serie, que a mi parecer se inclina por la comedia-romántica, pues, si bien sus protagonistas muestran sus conflictos internos, éstos son superables. Nada trágicos.

Laura es una fuerte y tenaz profesora que siempre ha estado sobreprotegida por sus cuatro hermanos mayores; es así que, buscando la independencia, logra encontrar trabajo en la escuela del pueblo de los Ryder, gracias a su amiga Annie. Aunque, primero, durante el verano, intentará aprovechar el trabajo que le ofrecen en la casa de Wade, para llegar a su objetivo de ahorrar dinero y comprarse su propia casa en ese lugar.

Wade es un tipo guapo y duro, pero vulnerable debido al accidente que le impide, momentáneamente, realizar sin problemas sus actividades diarias. Esta mezcla en su personalidad será percibida por Laura quien de inmediato se verá atraída por él, pese al reacio comportamiento del vaquero que se opone a aceptar la ayuda que le brindan sus queridos primos a través de la hermosa chica.

Al principio te da la impresión de ser el clásico personaje masculino que ha sufrido un desengaño amoroso y que ya no quiere saber nada de mujeres. Pero lo interesante es que se encuentra con una especial y poderosa rival que está a la altura de su propia batalla verbal y que le inyecta energía a su vida.

Los primeros capítulos están llenos de escenas cotidianas bien narradas y de forma original, donde Laura va ganando terreno en la organización de la casa; además, tiene el apoyo de Duff, el viejo y paternal vaquero que ayuda a Wade; hasta conquista a “Frank”, el perro vaquero de Wade.

Laura poco a poco se va metiendo dentro del golpeado corazón de Wade, quien se dará cuenta de que no sólo la necesita para llevar su casa, sino que la desea exclusivamente para él.

Los ingeniosos y sensuales diálogos; las discretas y precisas invectivas; la atmósfera jocosa que generan los primos Ryder, resaltando siempre los fuertes lazos familiares; la aparición de los celosos hermanos de Laura; hacen que esta lectura sea bastante entretenida para ser una historia corta.

Destaco la agradable portada caricaturesca.

Recomendable.