Mary Balogh - Ligeramente casados

Valoración:

Crítica de Katon

En Francia, en el campo de batalla, el altivo pero caballeroso lord Aidan Bedwyn le prometió a un soldado herido de muerte que en el futuro protegería a la hermana que este dejaba en Inglaterra.

El azar lo lleva así ante Eve Morris, con un juramento que él está empeñado en cumplir pese a que ella rechaza toda ayuda... O casi toda, porque, en efecto, si Eve no se casa se verá desposeída de la mansión en que se crió. Aidan le hace una oferta a la que no podrá oponerse: un simple matrimonio de conveniencia, pasar juntos unos cuantos días y después toda una vida de feliz independencia separados. Sin embargo, no contaban con una irresistible atracción mutua que puede dar al traste con sus prácticos planes... ¿Les será posible estar solo ligeramente casados?

 

Opinión: 

No es solo que Eve se quede en la calle, sino que también se quedarán su tía oriunda de Gales que vendió su casa para vivir con Eve, su ama de llaves, mujer que había estado en la cárcel y que no tenía posibilidades de encontrar trabajo, Charli, un joven algo más lento que el resto pero que pone más ganas y entusiasmo que nadie, la institutriz y su hijo pequeño, fue despedida cuando se enteraron que estaba embarazada de su patrón, y no de forma voluntaria y sus niños, Davy y Becky dos huérfanos que por casualidades del destino llegaron a su casa hace un año y que ya los quiere como si fueran sus propios hijos.

Cecil Morris, no es solo su primo, es el hombre que se quedará con su casa en el plazo de unos días. Percy el hermano de Eve ha muerto antes de que pasara un año desde la muerte de su padre por lo que la casa y todo el dinero pasará a manos de Cecil.

Aidan tenía pensado marcharse al día siguiente de darle la mala noticia a Eve, pero el resfriado de su ayuda de cámara lo hace retrasarlo un día más. Tras el funeral por Percy se reúnen en casa de Eve donde Aidan conoce a Cecil, éste no puede dejar pasar al hijo y hermano de un duque. Le cuenta sin ningún tipo de reparos que en pocos días la casa le pertenecerá y procede a explicarle los cambios que hará en la casa. El semblante inexpresivo de Aidan confunde a Eve que cree que está de acuerdo con Cecil y por tanto, traicionándola a ella.

Por eso cuando al día siguiente se presenta nuevamente en su casa y se ofrece a sí mismo en matrimonio se queda totalmente sorprendida. Él decide casarse no porque ella le atraiga, no porque le parezca una persona afín a su carácter, no porque vaya a acompañarle en futuras campañas sino porque le prometió a su hermano en su lecho de muerte que la protegería, que haría lo que fuese necesario, y ambos saben que la única solución es el matrimonio.

Ingenuamente creían que podrían casarse y separarse para continuar cada uno con sus vidas, pero el destino les cruza en el hotel de Londres donde se alojan con otro militar, Aidan presente a Eve como su esposa, ese momento será crucial aunque ellos aún no lo sepan.

Días después de la ceremonia y cuando Cecil Morris es consciente que ha perdido la casa para siempre Adian Bedwyn vuelve a casa, a Lindsey Hall, donde se reencuentra con todos sus hermanos, incluido el duque con el que discutió hace tres años. Pero a los pocos días Aidan tendrá una sorpresa, su hermano Wulf, el duque se ha enterado de su matrimonio. Exige que la mujer de su hermano sea presentada en la corte ante la reina, además de realizar una cena en su honor. Aidan le cuenta la verdad sobre su matrimonio. Pero el duque solo piensa en el honor y en el deber, da igual que Eve sea hija de un antiguo minero, que su acento sea de Gales, ahora es una Bedwyn y debe ser tratada como tal. Aidan se niega pero Wulf va a verla en persona y la convence para que ahora sea ella la que le haga el favor a Aidan y su carrera. El reencuentro en Londres cambiará sus vidas.

Aidan es un hombre serio, inexpresivo, cuesta saber qué está pensando, para él el honor está por encima de todo, pero también es un hombre cansado, lleva más de 12 años en la guerra, hacía tres que no pisaba Inglaterra y cuando vuelve a casa es cuando se da realmente cuenta de lo cansado que está. Admira a Eve por como es, por cómo trata a los demás y por cómo se ha enfrentado a su hermano el duque aún sin ser de su misma clase social.

Eve haría cualquier cosa por las personas que la rodean, que la cuidan y que la apoyan. Poco a poco empieza a entender el temperamento del coronel Bedwyn, cada vez le admira más, su apoyo constante, su presencia, la fuerza que le trasmite hace que poco a poco otros sentimientos más profundos vayan creciendo en su interior. A pesar de lo que siente por él Eve decide sacrificar su amor por la carrera de él, no quiere decirle lo que siente, pero al final se llevará una grata sorpresa.

Me ha gustado el libro, la confianza es algo que se forma poco a poco y aquí se ve perfectamente. Los personajes que en un principio parecían fríos evolucionan a lo largo del libro. Lo que no me ha gustado tanto han sido los hermanos de él, sobre todo al principio Freyja, la hermana, se muestra muy fría y altiva con Eve, la ignora, aunque luego cambie de actitud cuando vea la auténtica personalidad de Eve. Y por supuesto Wulf, ya que parece que le da igual los sentimientos de sus hermanos, para él solo se debe hacer lo correcto, da igual si destroza la felicidad de un hermano o sus verdaderos deseos.

Valoración 3/5 

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