Julianne MacLean - Reclamada

Crítica realizada por Carmela

Libro 2 de la Serie "Highlanders"

Angus MacDonald, conocido como "El León", regresa del destierro para reclamar lo que le corresponde: su castillo. Pero el rey ha concedido su hogar al clan MacEwen.
Angus y sus hombres se hacen con el castillo y él anuncia que tomará a Gwendolen MacEwen como esposa. A pesar de que el guerrero la atrae, la muchacha no quiere dar su brazo a torcer y se resiste a él. Pero con el tiempo, la dulce personalidad de Angus va minando la frialdad de la muchacha y acaba por enamorarse de él.
Sin embargo, no todo va a ser felicidad porque Murdoch, el hermano de la joven, está dispuesto a acabar con Angus sea como sea y conseguir que se cumpla la profecía de que su rival morirá ahorcado.

Si alguna ha leído el primer libro de esta serie, ya conocerá al protagonista, Angus MacDonald.

Este personaje aparece como un guerrero sin piedad, orgulloso y vengativo, que lo único que busca, después de haber sido desterrado, es volver a conseguir lo que se le robó y que por derecho le pertenece.
Como tantos otros héroes de este tipo, ha sufrido persecución, su padre murió, su familia lo perdió todo y él ha tenido que estar alejado del hogar. Por si fuera poco, la corona ha dado su castillo a otro clan. No es de extrañar, por tanto, que su carácter sea hosco, orgulloso y déspota incluso.

Y tampoco puede extrañarnos que Angus entre a saco en su propio castillo, lo haga suyo y tome a la joven MacEwen como esposa. Es algo que hemos visto ya muchas veces en las novelas románticas en que hay pugna entre clanes.

Siguiendo con la norma que parece establecerse en estas novelas, la chica se resiste por activa y pasiva a ese guerrero al que encuentra atractivo pero fiero, altivo y demasiado mandón.

Que acaban enamorados en un hecho que nadie puede dudar. Entre los protagonistas se crea primero una especie de entente cordiale y luego nace la pasión. Porque ni Angus es tan fiero como aparenta ni ella tan fría hacia los encantos de ese guerrero rubio.

Protagonistas bien definidos, de fuerte personalidad que en el fondo albergan ternura, intrigas, lealtades y deslealtades, traiciones y sentimientos encontrados. Una buena narrativa que hace fácil leer la novela y diálogos entretenidos.

Los personajes secundarios, en su sitio.

No voy a decir de este libro que es diferente a otros en esencia, porque ya podéis ver que la historia no es nada especial, pero sí que está entretenido, aunque ya sabemos cómo va a ser el final y de intriga tiene poco. El romance entre los personajes principales es lo que se espera, pero resulta bonito.

Concretando: historia nada imaginativa de rivalidad pero que hace pasar unas buenas horas y merece la pena leer si os gustan los libros de highlanders.