Johanna Lindsey - La furia del amor

Crítica realizada por Lolailo

Wulfric de Thorpe fue prometido cuando era niño a Milissant Crispin, la hija menor del mejor amigo de su padre. Una unión perfecta para las dos familias, pero el único encuentro entre los dos niños fue un desastre que no hacía presagiar nada bueno para el futuro... Pocas veces dos personas llamadas a unirse en matrimonio han estado tan mal dispuestas la una hacia la otra. Cuando Wulfric llega al castillo para reclamar a su prometida, comprueba que ahora, a los dieciocho años, la belleza de Milissant sólo es superada por su audacia, sin duda una cualidad femenina poco atractiva a los ojos del apuesto y arrogante Wulfric, futuro conde de Shefford, que prefería una mujer más sumisa.

Los jóvenes tienen un mes de plazo para acostumbrarse el uno al otro, tiempo durante el cual Milissant intenta desesperadamente buscar una escapatoria al matrimonio. Pero mientras el momento de la unión se acerca, también se cierne la amenaza de un peligro que podría destruir mucho más que una ceremonia nupcial.

Milisant Crispin fue prometida de niña a Wulfric de Thorpe. El primer encuentro de ambos, cuando aún eran niños, no pudo resultar más accidentado, es por eso que ninguno de ellos está especialmente deseoso de cumplir la palabra de sus respectivos padres.

Finalmente Wulfric, hombre de honor, accede ir hasta el castillo de Dunburh a reclamar a su prometida.

Cuando llega allí no puede evitar sentirse horrorizado ante el aspecto de su futura esposa. Milisant es una joven temeraria, valiente y....que va vestida como un hombre y prefiere realizar las actividades propias de estos.

Por si esto fuera poco la joven parece profesarle un odio y una antipatía instantáneas. Él no lo sabe pero a resultas de su primer encuentro Milisant estuvo a punto de quedar lisiada.

A pesar de que ella no es lo que él esperaba, persiste en su intención de desposarse con ella y cuando la joven le confiese que ama a otro, llevado por el despecho y los celos le dirá que él también ama a otra y que el amor no tendrá nada que ver en su matrimonio.

Mientras ambos tratan de reconciliarse con la idea de su futuro casamiento, alguien atenta contra la vida de Mili Sant y Wulfric, temiendo por ella, decide llevarla a su propio castillo donde estará mejor vigilada.

A pesar de lo que pueda parecer, el joven cada vez se siente más y más atraído hacia su prometida y cuando tenga ocasión de verla engalanada como una dama un enorme deseo se despertará en él.

Milisant tampoco es indiferente a los muchos atractivos de Wulfric y cada vez le costará más luchar contra los sentimientos que el joven despierta en él.

Cuando Wulfric corra serio peligro de morir por culpa de los enemigos ocultos de la joven, todos los sentimientos que guardaba su corazón quedarán finalmente expuestos.

Esta novela, ambientada en la época medieval, contiene todos los ingredientes para ser una buena historia: trama entretenida, malvados, relación tensa de los protagonistas....pero también tiene un par de puntos flacos según mi opinión. Uno es el carácter de la protagonista, que en ocasiones se hace realmente insoportable, al menos a mi me lo pareció. Otro aspecto que no me convenció mucho fue la cursilería de algunos aspectos: el mote del supuesto enamorado de ella, el hecho de que se intercambie los papeles con su hermana gemela, que el rey Juan la desee a primera vista hasta el punto de arriesgar la amistad de un aliado.....no sé, son pequeños detalles que chirrían un poco, claro esto después de haberla releído unas cuantas veces.

Por otra parte el personaje de Wulfric es encantador, me gustó mucho y en ocasiones me parecía demasiado bueno para ella.

En general es una buena novela y bastante entretenida.

Mi valoración es buena.