Grace Burrowes - El deseo de Navidad de Lady Sophie

Crítica realizada por LadyMacbeth

Libro 1º de la serie Las hijas del duque

Todo lo que Sophie Windham quiere es paz, tranquilidad y la novedad de un poco de soledad en la mansión londinense del duque de Moreland antes de que se una a su familia para la Navidad en la casa familiar en Kent. En medio de una incómoda tormenta de nieve en Londres, a Sophie le toca encargarse de un bebé abandonado, y solo la ayuda de un apuesto desconocido, Vim Charpentier, se interpone entre ella y un completo desastre...

Los peores recuerdos de Vim Charpentier corresponden a las Navidades con su familia en Kent, así que cuando tiene una excusa para permanecer unos días más en Londres, de buen grado le echa una mano a Sophie para que se familiarice con su nueva carga. La creciente atracción que comparte con Sophie les calienta el espíritu, pero cuando los tres hermanos de Sophie lleguen de Oriente para llevársela, Vim tendrá que decidir entre enfrentarse a sus recuerdos o dejar que el regalo de Navidad de su vida se escape entre sus dedos.

Lady Sophie Windham es la hija del Duque de Moreland, y a pocos días de Navidad, mientras toda la familia se ha trasladado a la finca campestre para pasar las fiestas, ella convence a sus padres para ir a pasar unos días a casa de unas amigas y luego sus hermanos la recogerán para ir juntos a reunirse con el resto de la familia. Sin embargo, las intenciones de Sophia son otras: pretende quedarse sola en la casa de Londres aprovechando que les han dado vacaciones a todo el personal de servicio. Con lo que ella no contaba era con que dejarían abandonado a un bebé y ella deberá hacerse cargo de él. El problema es que ella no tiene ni idea de las necesidades de un bebé y mientras se encuentra en una estación de coches de postas, con el bebé que no deja de llorar, se le acerca Vim para preguntarle si le puede ayudar en algo. Ella está desesperada porque el niño no deja de llorar y Vim se ofrece a explicarle lo más esencial del cuidado de un bebé. Para ello se trasladan a la casa de Sophie que hace ver que ella es una empleada de la casa, y como hay un temporal muy fuerte de nieve invita a Vim a quedarse a pasar la noche...

Primero de todo, quiero decirle a la editorial que como es que no publicaron este libro en navidades, a lo mejor estando mimetizada con el espíritu navideño me hubiera pasado mejor este palo de libro. Pero en época de rebajas que te hablen de la navidad..... no, en serio, qué tostón de libro!!!. Me ha aburrido a más no poder, de hecho lo empecé y lo dejé, pasaron unos días y lo volví a retomar, y todavía no sé cómo conseguí acabarlo. Admiro a las personas que dejan los libros a medias, porque yo no puedo, lo dejo unos días pero al final siempre vuelvo, por peñazo que sea el libro.

La pareja protagonista me ha parecido de las peores parejas que he leído, yo no he visto por ningún lado ni la pasión ni el enamoramiento ni tan siquiera la atracción. Lo más inverosímil de todo es el argumento, lo del niño es increíble, pero lo más sorprendente de todo es que Vim, un caballero inglés, heredero de un conde del siglo XIX, SABE CAMBIAR PAÑALES A UN BEBÉ!!!!! Y encima le explica a Sophie cómo hacerlo, cómo darle de comer, qué darle de comer... a lo mejor era pediatra y a la autora se le olvidó especificarlo...

Lo mejor del libro son los tres hermanos de Sophie, que luego he visto que son los protagonistas de los libros anteriores de la autora: El Heredero, El Soldado y El Pianista. La autora deja entrever un poco sus historias, pero como yo no me he leído sus libros pues tampoco he acabado de entender algunas cosas. Las escenas en las que salen ellos se anima un poco la historia, sobre todo porque le hacen bromas a Vim por haber estado a solas con su hermana en la casa ducal.

En resumen, me ha parecido muy lento y pesado y la historia insulsa, por muy de cuento de navidad que nos lo quieran vender. Le doy un aprobado raspado por el mérito que tiene la autora de haberse inventado una historia tan tonta.

Valoración: 2,5 / 5