Connie Mason - Pura tentación

Valoración:

Crítica realizada por Mencía

Black Jack Graystoke, el último descendiente de una noble familia venida a menos, es el mayor granuja de toda la alta sociedad londinense, y todo parece indicar que se dirige sin remedio por el oscuro camino de la perdición. Para evitarlo, intervendrá el fantasma de la familia: Lady Amelia, espectro que sólo se deja ver cuando tiene que enderezar el rumbo de uno de sus irresponsables descendientes.

Recién llegada de Irlanda, Moira O'Toole no es tan tonta como para creer en leyendas, ni lo bastante ingenua para confiar en alguien con la reputación de Graystoke. No obstante, después de que el destino —o, tal vez, Lady Amelia— la lleve hasta Graystoke Manor, se encontrará total y irremisiblemente seducida por el encanto de Jack, con esos ojos grises de tormenta capaces de hacerla perder la razón, y no tardará en darse cuenta de que su resistencia será inútil.

Lo que no puede sospechar Jack es que bajo la cautivadora belleza de la muchacha se esconde un pasado misterioso y una oscura amenaza que puede llevarlos a la muerte… o a la salvación.

Las novelas que cuentan en el reparto con un espectro - sea de tipo que sea-  no son santo de mi devoción, pero he de reconocer que, en este caso, hasta llegué a cogerle cariño. Hago esta aclaración pensando en las que como yo, sienten cierta animadversión por las ánimas redentoras que a veces nos meten con calzador. Lady Amelia  ha resultado ser una dama de lo más discreta, nada charlatana ni proclive a fantasmadas varias, y no creo que se merezca que la castiguemos con el látigo de nuestra indiferencia. Mas, cuando la novela en sí puede resultar, como ha sido en mi caso, una lectura de lo más entretenida.

Para abrir boca, tenemos uno de esos protagonistas del tipo “crápula por vocación sin la menor intención de redimirse, ni ante los estertores que preceden a la muerte”. Es fácil de adivinar que el libidinoso que nos ocupa,  goza de un físico de infarto y una personalidad de lo más sugerente. Aunque en contrapartida, ande sin un clavel y no tenga grandes aspiraciones en la vida.

En este punto de su banal existencia, a Black Jack no le queda más remedio que recurrir al consabido matrimonio de conveniencia, con la conveniente rica viuda, que lleva meses calentando su cama, si no quiere permitir que su mansión se hunda o él acabe con sus huesos en prisión por deudas.

Una noche, tras una borrachera en compañía de su mejor amigo, nuestro hombre cree ser el causante de un accidente que deja malparada a una joven. Razón por la cual, la acoge en su casa y le procura los medios para que pueda recuperarse.

Jack se percata desde el primer instante de la peligrosa e inconveniente atracción que siente por ella. Pero se deja llevar por una tonta apuesta que le puede proveer de un buen dinero, de ganarla, y en el peor de los casos, de un buen rato de diversión a costa de los idiotas que llenan los salones de la alta sociedad.  

Moira O'Toole se traslada a Inglaterra, desde su Irlanda natal, en un intento desesperado por ayudar a su hermano o, cuanto menos, evitarle el coste de tener que alimentar una boca más. Pero salir adelante resulta más complicado de lo que pudo prever en un principio, y una noche, por circunstancias que no debo desvelar, acaba mal herida al borde de un camino.

Cuando el hombre que la recoge, le propone intentar engañar a la alta sociedad haciéndola pasar por una dama, de forma que pueda encontrar un marido que la saque de su difícil situación económica, Moira, aun sin estar muy convencida, acepta.  Jack no lo sabe, pero la joven tiene poderosos motivos para intentar permanecer el mayor tiempo posible bajo su protección, y además dista mucho de ser la casquivana que él presupone.

Bueno, pues hasta ahí puedo leer….

Pura tentación es una novela amena, que va ganando interés según avanzas en su lectura.

 Me han gustado sus protagonistas (que se hacen querer), pero no menos lo han hecho sus secundarios (por cierto de lo más variado y variopinto).

Cierto que ves de lejos como la autora deja el terreno bien abonado para que el final feliz sea de los buenos el mejor, pero también lo es que, hasta llegar ahí, te va llevando por caminos que no esperas.

Hay aventura, tensión, ternura y pasión, hasta un puntito paranormal en la figura de Lady Amelia. No es una obra profundamente conmovedora, ni abiertamente sensual, ni trepidantemente intrigante, pero ese granuja de Black Jack tiene su aquel y  en pequeñas dosis tienes de todo lo que más nos suele atraer.

En mi caso me reportó una tarde de lo mas distraída, con lo que… ¡misión cumplida!  

Copyright © 2002 - 2022 rnovelaromantica.com y elrinconromantico.com

| Aviso legal | Política de privacidad | Política de Cookies |

We use cookies

Usamos cookies en nuestro sitio web. Algunas de ellas son esenciales para el funcionamiento del sitio, mientras que otras nos ayudan a mejorar el sitio web y también la experiencia del usuario (cookies de rastreo). Puedes decidir por ti mismo si quieres permitir el uso de las cookies. Ten en cuenta que si las rechazas, puede que no puedas usar todas las funcionalidades del sitio web.